Oír su interior: maldita sea, ya está aquí ese chico
Terry sonrió al ver de qué manera su amiga se veía reducida a esto y añadió: Desde el momento en que cambiaste las reglas, Laura, creo que necesitas hacer un tanto más. ¿Qué hay de ti, qué piensas? Terry resaltó su pregunta con un golpecito de la cosecha. Sigue leyendo