Demandarás su presencia en el momento en que te sientas frágil
Con mi Ama delante, yo un paso por detrás y a su derecha, empezamos a caminar cara la casa, yo a 4 patas. Mi Ama me llevó de la correa hasta la Señora de la casa, que estaba acompañada de un esclavo/perro y una esclava/perra. Sigue leyendo